domingo, 5 de enero de 2014

¿Qué lección has aprendido por las malas?


Que nada salva una relación de pareja si no hay voluntad de las dos partes.

Que es más fácil casarse que divorciarse. ¡Cuánto papeleo! :)






Que las discusiones no suelen conducir a ninguna solución ni aclarar nada.
Que no hay que ser impaciente con los amigos.
Que mi felicidad está dentro de mí.
Que no hay que dejarse arrastrar por un pensamiento depresivo. Nunca.
Que segundas partes, en cuanto a las relaciones (y al cine), nunca fueron buenas.
Que más de una taza de café al día puede terminar alterándome.
Que al cuerpo hay que dejarlo descansar al menos un día a la semana. (¡Benditos domingos!)
Que no hay que tocar a la gatita tímida cuando está comiendo, porque reacciona dejando la comida y huyendo.

39 comentarios:

  1. Loly, tienes toda la razón! Ya he pasado por ambas situaciones y, pues eso, que no pude haberlo dicho mejor! :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Elena, eres sabia, has aprendido muchas cosas, pero eso de que, segundas partes, en cuanto a las relaciones (y al cine), nunca fueron buenas. te diré, al cine tienes razón, las segundas partes nunca son iguales a la primera. Pero en cuanto a relaciones, te puedo decir que existen excepciones, algunas veces la segunda es mejor.

      Eliminar
    2. Loly, también pasé por eso, pero a pesar del papeleo, disfruté tanto el divorcio como el matrimonio :P

      Eliminar
    3. Ylba, no dudo que tengas razón, sólo que yo no he pasado por una segunda parte que valiera la pena, por eso lo tengo como aprendido. Como dicen en la isla: "para atrás, ni para coger impulso". :)

      Eliminar
    4. Miriam me has matado de la risa con eso de que disfrutaste de tu divorcio tanto como de tu matrimonio. Si no fuera por tanto papeleo, yo también lo habría disfrutado mucho jajajaja.

      Eliminar
    5. Yo tuve una segunda parte y resultó más mala que la segunda parte de Instintos Básicos jajajaja.

      Eliminar
  2. He dado muchos tropezones en mi vida, que me han enseñado a vivir en Paz, producto de estas lecciones, la mayoría dadas por mis Padres, y completadas por mi Esposo, hoy puedo decir que vivo felíz.
    La lección mas reciente que aprendí fué de Amado Nervo, que soy la Arquitecta de mi destino,
    y producto de esta lección, voy diseñando cada día mi futuro.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso de ser arquitectos de nuestro destino tiene su lado oscuro, Ylba: lo somos cuando todo sale bien y también cuando no, y luego no hay a quien echarle las culpas :P

      Eliminar
    2. Elena, tienes razón, trato de diseñarlo con el cuidado de que me salga bien, si me sale mal, me conformaré.

      Eliminar
    3. Lo más importante Ylba es que las lecciones aprendidas te han hecho la mujer valiente y decidida que ahora eres. Enhorabuena.

      Eliminar
  3. a tener paciencia y a aceptar las cosas que la vida te manda y que ni las pediste ni las querías pero por algo las tienes

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Paciencia! Ya, ya está en mi hoja de pendientes :P

      Eliminar
    2. A mí la vida ni a golpes me ha enseñado aún a tener paciencia grrrrrrr

      Eliminar
  4. A NO DECIR MENTIRAS! Soy tremendfamente malo diciéndolas, tanto que siempre me descubren, y leugo el bochorno es peor... por eso (y no por "moralidd") propucro siempre decir la verdad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. perdón por los dedazos,,, estoy usando la laptop de mi hija con minitecladito...

      Eliminar
    2. Jajaja! Me has hecho reír, Aarón! Me recordaste aquello de "más rápido se descubre a un mentiroso que a un cojo" :P

      Eliminar
    3. No hay nada más vergonzoso que ver a un mentiroso enredado en sus propias mentiras Jimeneydas, qué bueno que esta incapacidad tuya de decir mentiras te obligue a ser sincero siempre.

      Eliminar
  5. Contar hasta 10 antes de responder, cuando estoy disgustada.

    A decir no cuando las circunstancias lo ameritan.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Algo más para aprender. Uff! Qué camino tan largo me queda por delante! :)

      Eliminar
    2. Yo me paso del 10 y sigo enojada grrrrrr

      Eliminar
  6. Qué no soy superchica, no puedo con todo y que tengo todo el derecho del mundo a decir que NO alguna vez.

    Que la gente se mal acostumbra... si siempre das y das, el dia que no podés te dan la espalda.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. TODO eso me falta por aprender...

      Eliminar
    2. Bueno, pelu.. paso a paso jajaj cuando llegues a mi edad tal vez hayas aprendido.. espero que nosea por las malas como yo :D

      Eliminar
    3. Eso Ceci, nadie debe cargar con todo, ni por decisión propia ni por imposición, bien por esos NO liberadores!

      Eliminar
  7. Por las malas aprendí a obedecer a mi mamá, me daba mis buenos cinchazos! :P

    Ahora he aprendido a ser paciente, la impaciencia no ha traído cosas buenas :(

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Miriam, a mí nunca me pegaron, pero mi madre tiene una firmeza que son solo mirarme bastaba para que me pusiera a temblar :)

      Eliminar
    2. Elena, Miriam, mi mamá hacía las dos cosas. Todavía hasta la fecha tiene una mirada como para correr a esconderse. Y pocas veces, llegó a tocarme como castigo, jeje, tengo que reconocer que fue bien ganado porque me portaba muy mal en esos momentos :P

      Eliminar
    3. Pelusa, seguramente nunca hiciste las travesuras que yo hacía :) mi mamá practicaba con la mirada pero al ver que no había respuesta, iba el cincho :P

      Lo mismo pienso de ti Hilda, no le debes haber dado muchos motivos a tu mamá, mi mamá todavía ahora se sorprende cuando nos escucha a mis hermanos y a mí, comentar nuestras hazañas :)

      Eliminar
    4. jejejeje eso es cierto, por eso solo me dio una tunda o dos :) coscorrones varios porque le rezongaba al contestar pero eran pocos :)

      jajajaja ¿entonces eras traviesa? yo le confesé después de muchos años, algunas travesuras a mi mamá, cuando ya no iba a darme una tunda jajaja

      Eliminar
    5. Yo era una niña ejemplar, siempre tranquila leyendo... Me eché a perder ya en la asolescencia, ajajaj!

      Eliminar
    6. Yo también fui una niña tranquila, no hacía travesuras, mi mami nunca me pegó, pero eso si, cuando se enojaba me lanzaba unas miradas que por poco y dejaban marca :)

      Eliminar
  8. Por las malas aprendí que nada es perfecto y que las personas no son malas ni buenas, todos somos personas. Aprendí por las malas que como se digan las cosas cambia todo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Dos muy buenas lecciones, sí señor!

      Eliminar
    2. Parecería que es sólo una cuestión de forma, pero eso de no decir las cosas como se las debería decir puede traer tantos problemas...

      Eliminar
  9. También he probado lo de las segundas partes Elena, y tampoco me fue bien. A veces es mejor una decisión definitiva aunque duela, que dejar que se deteriore aún más en una fallida segunda parte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es lo que yo decía, no es una verdad absoluta pero mayormente funciona así... Mejor decir no a las segundas partes :)

      Eliminar
  10. Que saber decir "no" es tan importante como saber decir "sí".

    ResponderEliminar

Es su turno, ¿qué opinan?